Jornadas formativas, visitas o un concierto de Navidad son algunas de las propuestas del proyecto, que se concretará próximamente en la creación de un punto informativo y de recepción del visitante en la puerta del Perdón de la catedral mirobrigense.
Poco a poco el punto de información de la Puerta del Perdón va cobrando forma en el marco del proyecto cultural “Catedral de Ciudad Rodrigo. La puerta del Reino”, incluido en el Plan de Intervención Románico Atlántico, promovido por la Junta de Castilla y León, Iberdrola y el Ministerio de Cultura de Portugal, en colaboración con las diócesis de cada territorio, y desarrollado en España por la Fundación Santa María la Real.
Audiovisuales y material gráfico servirán para adaptar las infraestructuras existentes en la Puerta del Perdón y convertirlas en un espacio idóneo para la recepción de visitantes, desde el que explicar no solo la historia del templo, sino también los objetivos y el alcance del plan de intervención.
Se prevé, igualmente, la instalación de un sistema de bancos calefactados en la capilla en la que actualmente se celebra la misa de invierno, con el objetivo de contribuir al bienestar de los fieles. La actuación será monitorizada para comprobar su incidencia en la conservación y gestión del monumento.
Como anticipo la creación del punto de información se llevarán a cabo diferentes actividades abiertas al público como las visitas temáticas guiadas, que tendrán lugar el viernes 15 de diciembre, en horario de mañana y tarde o el concierto de Navidad, previsto para el viernes, 22 de diciembre.
Completarán el programa sendas jornadas de puertas abiertas que servirán para dar a conocer la catedral, así como una jornada de formación dirigida a los responsables de la gestión del templo, que se celebrará hoy, gracias a la colaboración y buena disposición del cabildo. No faltará tampoco el diseño de material divulgativo, que servirá para dar a conocer las acciones desarrolladas en el templo en el marco del Plan Románico Atlántico.
Nuevas tecnologías aplicadas a la conservación del patrimonio
La actuación se ha concretado, por el momento, en la monitorización de la catedral, donde se instalaron 35 nodos con sensores, que ubicados en diferentes puntos del templo vigilan sus condiciones de temperatura, humedad, luminosidad u otros aspectos como la presencia de xilófagos que puedan afectar a la conservación de los bienes muebles.
Los datos que vayan arrojando los sensores, permitirán un mejor conocimiento del comportamiento higrotérmico del edificio y facilitarán su mantenimiento, conservación y gestión. La información reunida, junto a la obtenida en investigaciones precedentes realizadas en el templo, servirá para adecuar las futuras intervenciones a las necesidades reales del edificio, de tal manera que se puedan planificar y se anticipen a la aparición de daños.