La arquitectura de esta iglesia románica, por su estructura con pórtico en las tres fachadas, debe ser entendida en su función de santuario ya que fue un importante centro de peregrinación en época medieval. Presenta una sola nave cubierta de madera con artesonado y tirantes metálicos; cabecera rectangular cubierta por bóveda de cañón y cornisa sobre canecillos decorados en todas las fachadas excepto la principal.
La fachada principal, más alta que la nave, está coronada por una espadaña de tres vanos. En ella se dispone una portada de arco ligeramente apuntado y jambas con aristas redondeadas. Adosada al templo está la Casa de Misericordia –con función de museo- que posee una portada con arco de medio punto.
En el interior en el lado de la epístola, hay un arcosolio decorado con pintura mural, al que le sigue un retablo lateral del siglo XVIII donde se conserva una imagen de Nuestra Señora de la Piedad. La cabecera conserva un retablo mayor de madera blanco y dorado con sagrario en forma de templete y tribuna con trono. En el testero está representado San Miguel pesando las Almas.
Por otro lado, en el lado del evangelio se dispone el púlpito cuadrangular, con base de cantería labrada, así como un altar neoclásico con una representación de las Almas en el Purgatorio y una imagen del Santo Cristo de la Piedad.